viernes, 21 de septiembre de 2018

SÍNDROME METABÓLICO

El síndrome metabólico (SM) es un conjunto de anormalidades metabólicas consideradas como un factor de riesgo para desarrollar enfermedad cardiovascular y diabetes.






Se ha descrito a la insulinorresistencia como el pilar para el desarrollo de las alteraciones que  conforman el mismo, como son el aumento de la presión arterial, elevación de la glicemia de
ayunas, aumento de triglicéridos, disminución del colesterol HDL, así como
una condición de obesidad abdominal.
La relación entre obesidad abdominal e insulinorresistencia ha sugerido a la primera como origen o factor desencadenante del síndrome. Nos referimos a la obesidad abdominal u obesidad central como un incremento del perímetro abdominal, lo cual representa una medida indirecta del aumento de grasa visceral.

Los criterios diagnósticos propuestos para síndrome metabólico son diversos.
Desde el año 1988, en que el Dr. Gerald Reaven describe el síndrome como una serie de normalidades que incluye hipertensión arterial, diabetes mellitus y dislipidemia, denominándolo
‘síndrome X’, donde la resistencia a insulina constituía el factor o principal mecanismo fisiopatológico, se han publicado diferentes artículos y guías respecto al diagnóstico, prevención y
tratamiento del síndrome. La Organización Mundial de la Salud (OMS), International Diabetes Federation (IDF), National Cholesterol Education Program Adult Treatment Panel III (ATP III) y la
American Association of Clinical Endocrinologists (AACE) han propuesto sus criterios diagnósticos o componentes del síndrome metabólico.




Los criterios para el diagnóstico de síndrome metabólico según las recomendaciones
de las guías de ALAD 2010 son:

• Obesidad abdominal: perímetro de cintura mayor o igual a 94 cm en varones
y 88 cm en mujeres.
• Triglicéridos altos: mayores a 150 mg/dL (o en tratamiento hipolipemiante
específico).
• Colesterol HDL bajo: menor de 40 mg% en hombres o menor de 50 mg% en mujeres (o en tratamiento con efecto sobre el HDL).
• Presión arterial elevada: presión arterial sistólica (PAS) mayor o igual a 130 mmHg y/o PAD mayor o igual a 85 mmHg.
• Alteración en la regulación de glucosa: glucosa anormal en ayunas, intolerancia a la glucosa o diabetes.


La evaluación correcta de cada componente del SM nos llevará a buen diagnóstico y a detectar personas de riesgo alto que pudieran no estar siendo consideradas como tal, siendo tratadas por factores de riesgo individuales.

Las siguientes son sugerencias para una buena evaluación:

• Evaluación del perímetro abdominal: debe realizarse con el paciente en posición de pie al final de una espiración normal, con los brazos relajados a cada lado. La medida debe tomarse a la altura de la línea media axilar, en el punto imaginario que se encuentra entre la parte inferior de la última costilla y el punto más alto de la cresta iliaca (principal punto de referencia).

• Determinación de glicemia en ayunas: debe realizarse con por lo menos ocho horas previas de ayuno y en las primeras horas de la mañana, pues sabemos que fisiológicamente nuestro organismo tendrá una respuesta hepática compensatoria si no ingerimos alimentos y la mediciónno será exacta. De igual forma, fisiológicamente tendremos una concentración de glucosa elevada para nuestra referencia si no guardamos el ayuno respectivo, mostrando los resultados valores posprandiales,
para los cuales las referencias aceptadas son diferentes.

  • Determinación de triglicéridos y de colesterol HDL: también debe realizarse con por lo menos ocho horas previas de ayuno y en las primeras horas de la mañana. La concentración de triglicéridos puede variar según lo descrito para glucosa, no así el valor de HDL. Sin embargo, se recomienda que la medición de ambos sea en ayunas .

• Medición de la presión arterial: debe realizarse cuando la persona esté descansada y tranquila. No
debe tomarse después del ejercicio o si la persona se siente estresada. Recordemos que no estamos diagnosticando hipertensión arterial. Por tanto, nuestro objetivo debe ser claro respecto al valor de referencia (130/85 mmHg) para el diagnóstico de SM. La medición podemos realizarla usando un monitor digital para presión arterial o un esfigmomanómetro y estetoscopio. La medición va a ser correcta en ambos casos si realizamos el procedimiento de manera adecuada. Podemos utilizar la “Recomendaciones de la American Heart Association para la toma de la presión arterial”, publicado en la revista Circulation de febrero del año 2005.


1 comentario:

  1. Muy bien! solo que cuando uses pictografías de otros sitios de la web debes citarlas, de lo contrario es plagio

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